Las bajantes son elementos esenciales en la estructura de cualquier edificio. Se utilizan para evacuar las aguas pluviales o residuales de forma vertical hacia la red de alcantarillado. Existen distintos tipos de bajantes en función de su material, forma y funcionalidad.
Uno de los más comunes es el de PVC, un material resistente y duradero que se utiliza en construcciones modernas. Además, es un material fácil de manipular y con una vida útil prolongada. El de hierro fundido, en cambio, es más resistente a la corrosión y se utiliza en edificios históricos. Su aspecto es más clásico y añade un toque de elegancia a la estructura.
Otro tipo de bajantes es el rectangular, que se utiliza especialmente en edificaciones industriales y para construcciones con grandes volúmenes de agua a evacuar. Por otro lado, los bajantes acústicos son los más utilizados en viviendas particulares, ya que absorben el ruido generado por el agua al bajar y evitan molestias en los usuarios.
En conclusión, los tipos de bajantes son muy variados y se deben seleccionar en función de la necesidad y características arquitectónicas del edificio. Un especialista debe evaluar cada situación y determinar cuál es el más conveniente para evitar problemas futuros en el sistema de evacuación del agua de lluvia o residuales.