El agua potable que sale de nuestras griferías es uno de los recursos naturales más preciados. Sin embargo, ¿qué hay detrás del agua del grifo? ¿Quién la produce y qué procesos la hacen apta para el consumo humano?
El agua potable que sale de los grifos de nuestras casas se obtiene de los llamados Acueductos, que son sistemas de conducción de agua desde los recursos naturales hasta nuestros hogares. Estos acueductos recogen agua de las fuentes naturales como ríos, lagos o embalses, y la transportan a las plantas de tratamiento.
Las plantas de tratamiento son instalaciones dedicadas a la depuración de agua para garantizar su calidad y aptitud para el consumo humano. Estos procesos incluyen la desinfección con cloro, el filtrado, la remoción de sólidos, la floculación y la desinfección ultravioleta.
Una vez tratado, el agua se empaqueta en tuberías y se envía a una red de distribución, que lleva el agua potable a la gente. Esta red es administrada por empresas de agua, encargadas de controlar los niveles de calidad. También realizan labores de mantenimiento en la red para garantizar el buen funcionamiento de las tuberías.
Es importante tener en cuenta que el agua del grifo debe ser utilizada de manera responsable. La consciencia ambiental es una parte esencial del uso responsable del agua y del cuidado de los recursos naturales.