La ósmosis es un fenómeno natural que se produce cuando dos disoluciones con diferentes concentraciones de soluto se separan mediante una membrana semipermeable. Esta membrana permite el paso de algunas partículas como el agua, pero impide el paso de otras partículas como los solutos. El proceso consiste en el paso espontáneo de agua desde una solución más diluida a una solución más concentrada, de modo que el resultado es un equilibrio entre las dos soluciones.
La ósmosis es un proceso típico de la naturaleza, y es el responsable del intercambio de nutrientes en las células. También se usa para la desalinización del agua de mar para hacerla potable. La ósmosis se produce debido a la presión osmótica, que es la presión que se genera cuando un líquido se separa de otro a través de una membrana semipermeable.
En la ósmosis, el flujo de agua se produce a favor del gradiente de concentración, es decir, desde una solución con menor concentración de soluto a una con mayor concentración. Esto significa que el agua pasará de la solución más diluida a la solución más concentrada. El flujo de agua se detiene una vez que se alcanza el equilibrio entre las dos soluciones.
La ósmosis se puede usar para concentrar soluciones, para separar solutos, para purificar el agua y para eliminar los residuos tóxicos. La ósmosis es un proceso natural útil para la vida y el medio ambiente.