Existen diversas formas de almacenar agua para su uso posterior, ya sea para consumo humano, agricultura o industria. Hoy te presentamos algunos de los depósitos de agua más conocidos.
Uno de ellos es el tanque, también conocido como cisterna o aljibe. Este depósito suele ser de forma cilíndrica u ovalada y se utiliza para almacenar agua de lluvia o de ríos para su uso en los hogares o en la agricultura.
Otro depósito muy común es la pila o el pileta, que se utiliza principalmente para almacenar agua en las zonas rurales. Estos depósitos son de cemento u hormigón y suelen tener una forma rectangular o cuadrada.
Quizás uno de los depósitos más conocidos a nivel mundial es el acuífero, que es una formación geológica que almacena agua subterránea. Son muy importantes para el suministro de agua potable en las regiones donde no hay ríos o lagos cercanos.
Finalmente, otro depósito de agua muy utilizado es el embalse, que es una estructura construida para almacenar grandes cantidades de agua en cuencas hidrográficas. Estos depósitos suelen ser utilizados para generar electricidad mediante el movimiento de turbinas.