El dispositivo que controla el flujo de agua en una cisterna se llama flotador. Este dispositivo juega un papel vital en la regulación del suministro de agua en la cisterna de un baño, una taza del inodoro o cualquier otra aplicación de plomería.
Cuando el agua entra en la cisterna, el flotador se llena y se eleva. Una vez que llega a su nivel máximo, cierra la válvula de entrada de agua, deteniendo así el flujo. La función del flotador es asegurarse de que no haya exceso de agua en la cisterna y mantener una constante de agua en el depósito para su uso posterior.
Los flotadores vienen en diferentes formas y tamaños para ayudar a ajustar la cantidad de agua que fluye. El más común es el flotador de bola, que se compone de una bola de plástico flotante suspendida por una varilla. Otros flotadores incluyen el flotador de cubeta, que abre y cierra una compuerta para controlar el flujo de agua, y el flotador anular, que está diseñado para ajustarse a cualquier forma de cisterna.
Una cisterna consta de varias partes que son esenciales para su correcto funcionamiento. La válvula de entrada es la primera parte que se encuentra al momento de revisar el interior de una cisterna. Esta se encarga de permitir o detener el flujo de agua hacia el tanque de la misma.
El siguiente componente es el depósito, donde se almacena el agua que se utiliza en el inodoro. Por otro lado, el tubo de llenado es el que permite el correcto suministro de agua hacia el tanque, lo cual es controlado por la válvula de llenado, situada en la misma tubería.
En la parte inferior de la cisterna hay una serie de componentes importantes. El primero de ellos es la válvula de descarga, la cual se encarga de permitir la salida del agua de la cisterna hacia el inodoro. Además, el flotador es una pieza que se encarga de controlar el nivel de agua en el depósito y detener el suministro de agua cuando se alcanza el nivel deseado.
Por último, la palanca es una pieza exterior que se utiliza para accionar el asiento del flotador, permitiendo que el agua fluya hacia el inodoro y así realizar el adecuado proceso de descarga. En resumen, estas son las principales partes de una cisterna y conocerlas es importante para poder reparar o mantener en buen estado el sistema de agua en el hogar o cualquier lugar donde se utilice.
Las cisternas de los inodoros están compuestas por varios elementos esenciales, uno de ellos es el mecanismo interno que regula la entrada y salida del agua. Pero, ¿cómo se llama este componente?
El mecanismo que se encuentra dentro de la cisterna del inodoro se llama flotador. Este es el encargado de controlar el nivel de agua dentro de la cisterna y, por lo tanto, garantizar un funcionamiento adecuado del inodoro.
El flotador funciona mediante un sistema de palanca y flotador que se encargan de abrir y cerrar la válvula que suministra agua al depósito. Cuando el nivel de agua baja, el flotador se activa y abre la válvula para que el agua pueda entrar. De esta forma, el mecanismo asegura que siempre haya la cantidad adecuada de agua en la cisterna, lo que permite una correcta descarga de residuos.
Es importante recordar que, en caso de problemas con el flotador, es necesario repararlo o sustituirlo por uno nuevo para evitar fugas de agua, desperdicio de recursos y problemas de saneamiento.
La cadena del inodoro es uno de los principales elementos del sistema de descarga del inodoro. Se encarga de transferir la fuerza de la palanca al mecanismo que abre la válvula de descarga y, por tanto, permite que el agua del tanque fluya hacia la taza. Pero, ¿cómo se llama la cadena del inodoro?
En general, se le denomina simplemente "cadena del inodoro". Sin embargo, esta cadena no es un elemento uniforme, sino que se compone de distintas piezas que pueden tener nombres específicos. Por ejemplo, la cadena que conecta la palanca con la horquilla que abre la válvula se llama "cadena de la palanca". La que une esa horquilla con el tapón de la válvula se conoce como "cadena del tapón".
En resumen, si queremos hablar con precisión de las distintas partes de la cadena del inodoro, es conveniente conocer estos términos. Pero si simplemente nos referimos a ese conjunto de piezas que provoca el vaciado del tanque, podemos utilizar la denominación genérica sin problemas.
Armar la cisterna de un baño puede parecer una tarea compleja, pero con las herramientas adecuadas y un poco de paciencia, cualquiera puede hacerlo. En primer lugar, es importante tener en cuenta que existe una gran variedad de modelos de cisternas, por lo que los pasos exactos pueden variar de unas a otras. Sin embargo, en general, los pasos a seguir son los siguientes:
Lo primero es identificar las piezas que vienen en el kit de la cisterna, que suelen ser el tanque, la pecera, el flotador, el mecanismo de descarga y las tuercas y tornillos necesarios para su fijación.
A continuación, se debe colocar y fijar el mecanismo de descarga en el fondo del tanque. Este mecanismo es el encargado de que el agua se libere del tanque hacia la taza del baño cuando se acciona la descarga. Es importante asegurarse de fijarlo bien para evitar fugas de agua.
Después, se debe colocar el flotador. Esta pieza se encarga de controlar el flujo de agua hacia el tanque y, por ende, hacia la taza del baño. Ajustarlo de la manera adecuada es importante para evitar gastos innecesarios de agua.
Una vez que se han colocado estas piezas, se debe ajustar la pecera en el tanque y fijarla mediante las tuercas y los tornillos que se incluyen en el kit.
Finalmente, se deberá conectar la cisterna al tubo de alimentación de agua y probar que todo funciona correctamente. Si se detecta alguna fuga o algún problema en el flujo de agua, es mejor revisarlo de inmediato para evitar mayores inconvenientes.
En conclusión, armar la cisterna de un baño requiere de algunos conocimientos técnicos básicos, pero con paciencia y siguiendo los pasos adecuados, cualquier persona puede hacerlo. Sin embargo, si se tienen dudas o se perciben problemas mayores, es siempre recomendable buscar ayuda de un profesional.