La elección del tubo correcto para tu campana extractora es fundamental para garantizar un correcto funcionamiento y un ambiente libre de humo y olores. Los tubos más comunes en el mercado son los de aluminio, PVC y acero inoxidable.
El tubo de aluminio es una opción económica y ligera, pero no es recomendable en instalaciones de larga distancia, ya que su superficie rugosa tiende a acumular grasa y suciedad. Además, su durabilidad es limitada y se puede corroer fácilmente a causa de la humedad y la temperatura.
Por otro lado, el tubo de PVC es fácil de instalar, pero no es resistente a altas temperaturas y puede deformarse con el tiempo. También es vulnerable a las ralladuras y golpes, lo que puede afectar su funcionalidad. Por esta razón, no se recomienda para cocinas de alto rendimiento.
En contraste, el tubo de acero inoxidable es la opción más duradera y resistente en el mercado. Es ideal para cocinas profesionales y de hogares que cocinan con frecuencia, ya que soporta altas temperaturas sin deformarse ni corroerse.
En conclusión, el tubo de acero inoxidable es la mejor opción para garantizar un correcto funcionamiento y durabilidad en tu campana extractora. Aunque es más costoso que otras opciones, garantiza una extracción de humo y olores eficiente y segura en cualquier cocina.
Si estás planificando instalar una campana extractora en tu cocina, es importante saber qué diámetro de tubo necesitas para llevar el aire al exterior.
El diámetro del tubo de la campana extractora dependerá de la medida del collarín, que es el borde del conducto que sale de la campana. Usualmente, se encuentran diámetros de 120 o 150 mm, aunque pueden variar según el modelo de la campana y la potencia del motor.
A la hora de elegir el diámetro del tubo, debes tener en cuenta que un tubo con menor diámetro va a ofrecer más resistencia al flujo de aire que uno con mayor diámetro. Con esto en mente, es importante escoger el diámetro correcto para garantizar que el aire sea evacuado de manera eficiente y no se generen problemas de ruido o malos olores en la cocina.
En resumen, asegúrate de elegir el diámetro de tubo adecuado para tu campana extractora, revisando el tamaño del collarín, la potencia del motor y considerando la resistencia al flujo de aire. De esta manera, podrás disfrutar de una cocina libre de humo y malos olores.
La cocina es una de las zonas más importantes de la casa, pero también puede ser la que más problemas estéticos presenta. Uno de los elementos que más molesta visualmente es el tubo de la campana extractora.
Afortunadamente, hay varias formas de ocultar el tubo de la campana extractora. Una de las opciones más sencillas es instalar un falso techo de pladur que cubra el tubo. Además, esta solución es muy práctica, ya que permite colocar focos LED integrados que proporcionan luz adicional en la cocina.
Otra opción es la de utilizar pintura. Es posible pintar el tubo de la campana extractora del mismo color que las paredes para ocultarlo. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la pintura debe ser ignífuga para evitar riesgos de incendios.
También es posible disimular el tubo de la campana extractora mediante el uso de un revestimiento. Existen varios materiales como la madera, el metal o la piel sintética que se pueden utilizar para dar un toque de estilo a la cocina.
En resumen, para disimular el tubo de la campana extractora es posible recurrir a la instalación de un falso techo de pladur, la pintura o el revestimiento. Cada opción tiene sus pros y contras, por lo que es importante elegir la que se adapte mejor a tus necesidades y presupuesto.
Una campana extractora es un electrodoméstico de cocina que ayuda a eliminar el humo, los olores y la grasa que se producen durante la cocción. Una de las principales características que debes buscar en una campana extractora es su potencia, ya que esto determinará su eficacia para purificar el aire de la cocina.
Para saber si una campana extractora es potente, debes fijarte en su capacidad de extracción de aire. Esto se mide en metros cúbicos por hora (m3/h). Una campana extractora potente suele tener una capacidad de extracción de al menos 500 m3/h.
Otro aspecto a considerar es la velocidad del ventilador. Las campanas extractoras más potentes tienen varias velocidades de ventilador para poder ajustar la extracción según las necesidades de la cocina. Una velocidad alta permitirá una extracción más rápida y efectiva, mientras que una velocidad baja será suficiente para cuando se cocine a fuego lento.
Por último, también es importante considerar el tipo de filtro que usa la campana extractora. Los filtros más eficaces y duraderos son los de acero inoxidable o aluminio, que además son más fáciles de limpiar. Un filtro sucio o deteriorado disminuirá la capacidad de extracción de la campana extractora, incluso si es potente.
La distancia entre la cocina y la campana extractora es un factor crucial a considerar al momento de instalarla. Una incorrecta distancia puede afectar la eficacia de la campana y su capacidad para eliminar los olores y la humedad
En general, se recomienda que la campana extractora se coloque a una distancia de al menos 60 cm por encima de la superficie de la cocina. Esta distancia asegura que el equipo tenga suficiente espacio para capturar los vapores y la grasa, mientras que evita que se obstruya con utensilios de cocina o manos.
También es importante considerar la distancia horizontal entre la campana y la estufa. Se aconseja que la campana se coloque entre 50 cm y 90 cm de distancia horizontal desde los quemadores de la cocina. Esta distancia garantiza que la campana pueda hacer su trabajo de manera efectiva.
Además de estas medidas, es importante seguir las instrucciones del fabricante para determinar la distancia adecuada para su modelo específico de campana extractora. Al hacer esto, asegurará un funcionamiento adecuado y un ambiente de cocina más fresco, limpio y seguro.