Si bien los atascos en los desagües pueden ser comunes, también pueden ser bastante molestos. Muchos de nosotros hemos experimentado el inconveniente de la acumulación de residuos que obstaculizan el flujo del agua en el lavabo o la bañera. Afortunadamente, hay una herramienta que puede ayudar a deshacernos de estos problemas, y se llama desatascador turbo.
Paso 1: Antes de comenzar, asegúrate de tener todos los suministros necesarios. Esto incluye el desatascador turbo, un cubo grande de agua y el uso de guantes protectores, para evitar el contacto con cualquier posible residuo o bacterias.
Paso 2: Si es posible, remueve cualquier obstrucción visible en el desagüe. Se puede hacer esto utilizando un alambre o un gancho para retirar cualquier objeto que obstruya el paso del agua.
Paso 3: Ahora es el momento de usar el desatascador turbo. Comienza llenando el cubo con agua antes de sumergir la ventosa del desatascador en el agua para humedecerla. A continuación, coloca el desatascador encima del desagüe y presiona hacia abajo firmemente.
Paso 4: Ahora, comienza a bombear el desatascador haciendo movimientos hacia arriba y hacia abajo, sin moverlo del lugar. Continúa haciéndolo durante varios minutos hasta que sientas que el agua comienza a fluir libremente por el desagüe.
Paso 5: Cuando sientas que el obstrucción en el desagüe ha sido eliminada, prueba el flujo del agua para asegurarte de que todo esté funcionando correctamente. Si no, repite el proceso de desatascar con el desatascador turbo.
Con estas sencillas instrucciones, puedes usar el desatascador turbo de forma segura y eficaz. Recuerda siempre tomar las precauciones necesarias para proteger tu piel y la salud en general.