A todos nos ha sucedido alguna vez: estamos a punto de tomar una ducha caliente y el agua resulta estar fría. Entonces nos damos cuenta de que el calentador de gas no está funcionando y nos preguntamos ¿cómo solucionarlo? A continuación, te ofrecemos algunos consejos para arreglarlo por ti mismo.
Antes de iniciar cualquier reparación, asegúrate siempre de que el calentador esté apagado y desconectado de la fuente de gas. Ahora bien, la razón más común para que un calentador de gas no caliente el agua resulta ser la acumulación de desechos y sedimentos en su interior. Para evitar que esto suceda lo más recomendable es realizar una limpieza constante.
Empieza por revisar la válvula de gas. Si al encenderla, esta no funciona correctamente o no se enciende, es probable que la causa de la falla sea esta. Es importante que revises que la tubería del gas esté en buen estado, pues de lo contrario puede también causar una fuga peligrosa.
Otro problema común es la acumulación de óxido en el tubo de escape. Este obstáculo impide que los gases resultantes de la combustión escapen con normalidad y por tanto, reducen la cantidad de calor que llega al agua. Para solucionar este inconveniente es necesario retirar el tubo y limpiarlo por completo.
Finalmente, es posible que la resistencia del calentador resulte dañada o desgastada. En este caso, lo mejor es llamar a un técnico especializado para que realice la sustitución. Recuerda, siempre es mejor prevenir problemas y realizar un mantenimiento preventivo en lugar de tener que solucionar averías posteriormente.
En conclusión, no te asustes si tu calentador de gas no está funcionando correctamente. Con estas sencillas alternativas podrás solucionarlo por ti mismo si es que no hay averías graves. Pero si la dificultad requiere de habilidades especiales sigue nuestro último consejo y llama a un profesional. ¡Disfruta de una ducha caliente sin preocupaciones!