Un Junker es un tipo de horno que funciona mediante la combustión de gas. El sistema está diseñado para quemar gas y aire en el interior de una cámara con la finalidad de aumentar la temperatura en su interior.
El proceso de combustión en el Junker es un proceso muy eficiente, gracias a su tecnología de quemado de gas que aprovecha al máximo el combustible. Además, cuenta con un intercambiador de calor que ayuda a transferir el calor producido a través de la campana metálica del horno.
El quemador del Junker se ajusta para producir la cantidad exacta de gas y oxígeno necesarios para mantener la llama de combustión y la presión en equilibrio en la cámara de combustión. La llama se inicia mediante el encendido automático del piloto y se ajusta mediante la regulación de la presión de gas y la mezcla de aire y combustible.
El horno también está equipado con un sistema de control para garantizar un buen funcionamiento. La temperatura se mide con termopares y se controla mediante los ajustes en los controles del panel. Además, los gases de combustión se eliminan mediante un conducto de escape conectado a la chimenea.
En resumen, el Junker es un horno muy eficiente que proporciona una temperatura controlada y uniforme para el tratamiento térmico de piezas de metal. Este horno es utilizado en la industria metalúrgica para procesos de temple, revenido y recocido, entre otros.