La derivación de tuberías es una técnica de ingeniería que se utiliza para mejorar o cambiar la dirección de un fluido que fluye a través de una tubería. La derivación de tuberías se realiza al instalar una sección de tubería llamada derivación para cambiar la dirección del fluido. Esta sección de tubería debe estar diseñada de forma que permita el flujo sin alterar el caudal y la presión del fluido. Las derivaciones se pueden instalar en líneas horizontales, verticales o en ángulos rectos. Esto significa que el flujo del fluido se puede cambiar a cualquier dirección deseada sin tener que instalar una válvula.
La derivación de tuberías se realiza para cambiar la dirección del flujo del fluido, pero también se puede usar para dividir el flujo en dos o más ramas. Esto se conoce como ramificación, y se realiza al instalar una sección de tubería llamada bifurcación para separar el flujo en dos o más secciones. Una bifurcación también se puede usar para combinar dos o más flujos en un único flujo, lo que se conoce como confluencia.
En la mayoría de los casos, para evitar la pérdida de presión, la bifurcación debe estar diseñada cuidadosamente para que el flujo se distribuya uniformemente entre las ramas. Esto significa que la bifurcación debe tener una forma especial para lograr una distribución uniforme del flujo. Si se usa una bifurcación mal diseñada, puede producirse una diferencia significativa en la presión entre las ramas.
La derivación de tuberías es una herramienta muy útil para los ingenieros que diseñan sistemas de tuberías. Al usar derivaciones y bifurcaciones, los ingenieros pueden construir sistemas de tuberías capaces de transportar fluidos en cualquier dirección deseada con una presión adecuada. Esto permite que los ingenieros construyan sistemas de tuberías más eficientes, más flexibles y de menor costo.